martes, 7 de octubre de 2014

La sonrisa sin dientes

El valor más grande de Jaime Garzón —enamorado de mujeres muy bellas— no era enfrentarse a Romaña, que lo quería mandar matar, ni tratar de entrevistar a Carlos Castaño para impedir que lo matara, ni osar ridiculizar al presidente, a los altos mandos militares y a los más importantes personajes del país. Su valor más grande era quitarse las prótesis y, con su sonrisa mueca, que exhibía sin pudor dos solitarios caninos, hacer olvidar su momentánea feúra con su provocadora y veloz inteligencia. La sonrisa más mordaz de Colombia no tenía dientes.


Luis Carlos Galán le dice a Jaime Garzón

Palabras de Jaime Garzón, para no olvidar 

"Nadie podrá llevar por encima de su corazón a nadie ni hacerle mal en su persona aunque piense y diga diferente"

No hay comentarios.:

Publicar un comentario